Capítulo 5, Según Thot, De la ofensiva con los aprendices dentro y fuera del Reino.

Dániel no renunciaba a recuperar el favor de los aprendices. Por suerte, los parajes donde florecían los clanes de Artistas eran fecundos en agoreros y profetas.  

El primer profeta actuaba en el Patio de Armas;  el segundo en la Posada de Aprendices del Reino de Geta. Para dar mayor eficacia y sensación de ubicuidad, ambos llevaban el mismo nombre y declamaban subidos en cajones de pescado en salmuera, profetizando grandes desastres si Dániel no vencía. “El sol se oscurecerá y sobrevendrá el Caos, Dios está con nosotros y si no escucháis su voz hará temblar de nuevo la tierra. Volveremos al pasado, que digo al pasado, ¡al Bing-Bang!, si Dániel es desalojado. Retornaremos a la selva, los poderes oscuros traspasaran nuestras almas, será el fin de nuestra Atlántida de paz y de progreso...”.

La gente , después del primer lance de la Justa, ya no se acercaba mucho a los profetas , en parte porque como repetían mecánicamente el mensaje –incluso a veces se quedaban trabados y tenían que venir del CAU (¿Cómo? ¿Ahora? ¿Urgente?) a resetearlos - no se sabía si eran  personas de verdad o clones fabricados por Polichinela´s  Productions (los autómatas  eran construidos por el Ministerio de Pesquisas  para clonar a prohombres e hidalgos. Desde que se compendió que esto era un robo de identidades pasó a la historia como “Robótica”;  en tiempos de guerra siempre se producían avances decisivos para la humanidad). La cuestión era que,  por eso o por el olor del cajón del pescado, todo aquello olía mal, bastante mal.

El segundo de los profetas había descendido del cielo de la ANECA (Animae Naturae Expeditio Cum Acreditatium), encarnado en  prohombre y Regente de la Posada de Aprendices del Reino de Geta. Su paso por la tierra venía lleno de sacrificios y había renunciado a su gran vocación de artista docente para sacrificarse, prestando inestimables servicios a la causa del Rey. Había  impulsando excelentes  programas de cultura y pedagogía con los que había elevado el tono cultural de la Posada. Su dedicación y su vocación por la defensa del medio ambiente,  explicaba que los carteles anunciando los eventos culturales no tuvieran nada escrito , para no dañar con tinta los papeles ecológicos. No era muy dado a aparecer por las aulas: un profeta al fin y al cabo enseñaba con el ejemplo, no con el cronograma. Él prefería su cajoncito de pescado,  desde el que anunciaba el fin de la bonanza si el Rey perdía su corona.

Ningún frente había que darlo por perdido…ni siquiera en exteriores.

Alvar de Amanuense, ministro de exteriores, Canciller del Reino, se presentó ante el Rey. Dániel, sin dejar de mirar la bola de cristal del orbipedia, habló:

“El Notario Mayor me dice que los estudiantes orgasmus mundi podrían votar por fax…tengo a Wallander con los suyos inventándolo …y como no sabe si estará a punto para las elecciones,  lo mejor es traer urgentemente al reino a todos los orgasmus, con el objeto de que se unan a mis huestes …traedlos a la velocidad de la luz al cuadrado para que me voten en masa igual a energía, o algo así. Estar en contacto con Lega siempre instruye mucho. “

“Hay un inconveniente”…era apenas un murmullo lo que salía de la garganta del Canciller, mientras toqueteaba incómodamente las costuras del jubón.

“Explicaos…”

“Mi Señor”- prosiguió Alvar- “… no sé dónde están exactamente…”

!!¿Cómo que no sabes dónde están?!!- rugió Dániel.

“…Majestad, las órdenes eran catapultarlos hacia el exterior…sacarlos en paquetes , en cajones, sin importar dónde ni cómo, había que facturarlos  para subir los números como fuese. Yo he obedecido y han sido tantos que me es imposible localizarlos …incluso dudo que ellos mismos sepan donde están..la mayoría no conoce el idioma de los reinos donde estudian y se han dado casos de que cuando se enteran donde están ya tienen que regresar...

“Retiraos…más un poquito más…así…no..un poco más”

Mientras tanto, fruto del  plan de recuperación de estudiantes para la causa , la Ministra de Aprendices, Héna de Pravia,  se había inflitrado con habilidad en la Delegación de Aprendices. Una mañana de lluvia se puso dos coletas y una falda de tablas encarnada y se presentó en la reunión de la delegación de aprendices. “Hola, soy la delegada de una carrera a extinguir, me salvé de milagro y vengo a por los planes secretos de la Delegación…”. Sutil y astuta casi logra convencerlos.

“Es la ministra” , dijo una niña de cuatro años , hermana de una de las estudiantes , miembro de la Delegación,  que no tuvo más remedio que llevarla a la reunión porque aquel era día de fiesta en el reino , no tenía colegio ,  y en su casa no tenían con quien dejarla.

Como la Ministra era de natural amable, tan sólo dio dos hachazos encima de la mesa antes de huir gritando “os habeís quedado sin guarderías… por listos”.

Thot , por la gloria de Hirsch.

(CONTINUARÁ)